martes, diciembre 05, 2006

Perversa mente asesina

John, era un niño lindo, al menos eso decían de el. Desde muy pequeño siempre hacia cosas que parecían extrañas, una vez cuando su abuela estaba dormida, puso clavos en los zapatos de ella, cuando ella despertó y se dio cuenta de eso, simplemente sonrió y se volteo sin temor a nada, sin ni siquiera pedir disculpas, solo se fue… siempre fue un niño muy inteligente y muy analítico antes las cosas que lo rodeaban, siempre fue un niño rodeado de muchos compañeros y compañeras, todo marchaba bien en sus primeros 14 años.
Cuando tuvo su primera relación estable, comenzaron los problemas. Los primeros meses todo era perfecto no podría faltar otra cosa, se amaban, se casaron y tuvieron a su primer hijo: Carl. El trabaja muy poco y la mayoría de las veces nunca le alcanzaba su sueldo para mantener a su esposa y mucho menos a su hijo, cuando el le pidió a su esposa que lo apoyara económicamente, empezaron los problemas,

- Necesito que me apoyes con el gasto, no gano mucho dinero y lo sabes, no nos alcanza ni siquiera para pagar la renta de la casa, ni para la luz, ni siquiera el niño tiene para comer.
- ¡ y como pretendes que trabaje si me sacaste de la escuela y lo único que se hacer es de comer y arreglar la casa!
- Pero para tener hijos nadie te enseño verdad – Jonh se empezó a desesperar y perdió el control de sus impulsos, fue cuando despertó el demonio que tenia por dentro.
- ¿ahora empezamos con los reproches, pues yo nunca quise tener un hijo?

Simplemente no dijo nada, empezó a pegarle de una manera violenta, no midió las consecuencias de sus actos. Después de haberla golpeado brutalmente, la dejo en el sillón y el quedo sentado viendo la tele, lo único que veía era rallas, la pantalla en blanco y en negro, pensó en que tenia que hacer para que nadie se diera cuenta sobre su cometido, obviamente había matado a su esposa, pero tenia un cargo mas, su hijo, como se desharía de su hijo, pensó y pensó por horas y llego a la luz, la solución a sus problemas.
Se llevo el cuerpo de su difunta y asesinada esposa a un gran bosque, nunca enterró al cuerpo, simplemente lo llevo a la zona donde los osos acabarían con ella sin dejar rastro alguno, en cuando al niño, lo dejo en un callejón. Al otro día obviamente empezaría a llorar la criatura y el pasaría por el mismo lugar para que nadie se diera cuenta de que el seria capaz de abandonarlo. Al día siguiente paso por el callejón y la criatura aun no lloraba, decidió esperar un tiempo mas y dar otras vueltas por la cuadra, justamente cuando se iba a retirar, la criatura empezó a llorar, el corrió simulando que no sabia donde estaba el niño y la gente que estaba a los alrededores empezaron a buscarlo también, lo tomo entre sus brazos y empezó a gritar a la gente que llamaran a la policía o a los bomberos. Cuando el cuerpo de bomberos llego lo entrego y sin ningún remordimiento se fue a su habitación, tomo sus cosas y se mudo a Alemania, durante el viaje se deprimió demasiado, no se sentía satisfecho por hacerlo por que tal ves si lo hubiera planeado hubiera salido mejor y ahí mismo empezó a desarrollar su próximo asecho,
Llegando al departamento donde se hospedaría, dejo sus cosas y empezó a armar su boquitin para momentos especiales (así lo llamaba el), donde tenia, cuerdas, formol, una pistola de 4mm, navajas, unos guantes y un sombrero de piel negro. Esa misma noche salio a un bar por dos principales cosas, la primera y mas necesaria dinero y la segunda, escogería su próxima victima.
Al llegar al bar se sentó y pidió una botella de güisqui, tomo una de sus copas y se percato que una chica lo veía de reojo, con la copa le pido un brindis y ella acepto, fue la primer pauta que hizo para conocer a su victima, ella fue a su mesa y tomo de su botella y empezaron a hablar sobre ella, ella era casada y su esposo nunca estaba en casa, ella era la victima indicada, siempre atenida a su marido, justo lo que el odiaba, ella le pidió que siguieran la conversación en su casa, el la rechazo y prefirió alejarse de la victima sin mas detalle, la dejo sola en la mesa y con la botella de güisqui
Paso un mes en que el la seguía sin que ella se diera cuenta, y la observaba anotaba todo lo que hacia, a que hora, como actuaba y toda la rutina que hacia. Pasaron dos meses y el estaba listo para asechar en cualquier momento.
Un viernes salio al mismo bar donde ella asistía todos los fines de semana, la encontró y compro la misma botella de güisqui, cuando ella lo miro se fue directamente sobre el, reclamándole lo de la vez pasada, el se disculpo y la charla continuo, y continuo hasta que ella le propuso que fueran a su casa por que su marido no estaba, el simplemente tomo la botella, y se fueron a su casa. Cuando llegaron a ella, la tomo por la espalada e hizo que inhalara formol, hasta que se desmayo, y el show comenzó.. por principio de cuentas quito de sus ropas, la amarro de modo que quedara colgando, hato sus manos y sus pies como el hombre de Vitrubio de Da Vinci, se fumo un cigarro de marihuana para completar el ritual, rodeo la imagen de vidrios colocados estratégicamente por si se lograba escapar cayera en estos vidrios y no pudiera escapar, el tenia una gabardina que le llegaba hasta los pies, se despojo de ella y saco los guantes que cargaba en su botiquín para momentos especiales, se acerco a ella por el camino de vidrios que tenia y empezó cortando pedazos de carne de ella, gritaba de una forma espantosa, empezó por los talones hasta llegar a la rodilla, fue quitando pedazo por pedazo y lo colocaba como alfombra en el pasillo de vidrios, “el camino de la esperanza” (así nombrado), sin decir ninguna palabra, corto la soga que tomaba su pie derecho, el mismo que había cortado, en cada dedo de sus dos pies había colocado pequeñas velas que al final de esta tenían acido y derretiría los mismos, prendió vela por vela y se le quedo viendo como sufría, como lloraba del miedo, corto del otro lazo y la dejo colgando de sus manos, justamente como quedo cristo en la cruz, en su estomago había pintado círculos de color negro y blanco, del otro lado había cerbatanas que contenían diferentes tipos de enfermedades entre ellas estaba el VIH, leucemia, rabia, entre otras.
Nunca se imagino que su marido llegaría esa misma noche, pero ya lo había previsto también, se escondió detrás de la puerta y aplico la misma formula, un poco de formol y lo amarro de pies y manos de forma que no se pudiera desamarrar y al ver lo que le había echo a su esposa empezó a llorar del dolor, John le pidió que escupiera las cerbatanas y por cada cerbatana que no le atinara al estomago de su esposa le cortaría los dedos. Fallo tres disparos y efectivamente le corto los dos pulgares y el dedo índice, después de eso, su esposa estaba agonizando y el seguía en el ritual, los pies se habían derretido por el acido y el no tenia tres dedos. El efecto de la marihuana empezaba a terminar y el se empezó a deprimir por que no era lo que el había imaginado, simplemente dejo caer a la señora al piso, enterrándose todos los vidrios que había en el suelo y al señor, le corto la yugular con su navaja y así los dejo.. después de eso salio de la casa sin que nadie se diera cuenta, tomo el carro de su esposo y se fue, llego a un barranco donde nadie transitaba por esa zona, baño el carro de gasolina y prendió fuego después de dejarlo ir por el barranco, pero aunque siempre pienses en todo lo que pueda suceder siempre hay algo que sale mal, se dio cuenta que eso no era lo que el buscaba, camino por toda la carretera hasta llegar a la jefatura de policía, cuando lo vieron el estaba manchado de sangre en toda la ropa, los policías se acercaron a el con pistola en mano, y saco de su pantalón una pistola, abrió la boca y se disparo…
Dentro de su botiquín traía todos su planes que tenia para efectuar, los policías lo sacaron y se dieron cuenta de lo atroz que tenia pensado este hombre… lo apodaron… el hombre del bitruvio