miércoles, julio 05, 2006

VoLvEr A NaCeR--

esto fue una parte de un libro mio obviamente, que aun no concluyo pero pronto lo hare, les pondre una parte y asi susesivamente spero les agrada y si no mmm ps nimodo ahi me dejan sugerencias...

La noche se sentía muy fría, los pájaros cantaban agonizando. Yo no sabia que era lo que pasaba esa noche, lo único que recuerdo es a una bella dama diciéndome unas palabras antes de que me desmayara y quedara inconsciente....
Esa noche no sé lo que ocurrió ni lo que sucedió, la única pista que me han dejado es una bolsa con tres artículos: un espejo, dinero y unas cartas que no tienen escrito nada; para qué servirán, aún no logro entender que significan esos objetos, no recuerdo mi nombre ni mi edad; ahora mismo estoy en casa de un extraño quien me llama “Gauss”.
Ese mismo día decidí salir, recuerdo que era 12 de mayo fecha que me recordaba algo, pero no tenía la capacidad de hacerlo. Llegué a un bar y decidí pasar a tomar algunas copas y fumar unos cuantos cigarrillos. Ya daban las 2 de la mañana y una señorita o al menos eso parecía; se me acerco preguntándome:

-Disculpa amigo... ¿Tú eres Millarca?- dijo la señorita - recuerdo tu rostro en algún lugar, tienes que ser tu.
-Hmmm no lo se he perdido la memoria y no recuerdo nada de mi pasado- preferí decirle la verdad, tal vez ella me podría ayudar a ver quien era y que es lo que había pasado realmente con mi vida.

Saliendo del bar la acompañé a su casa, tuvimos una charla muy amena, tal ves fuimos grandes amigos y yo no lo recordaba. Al llegar a su casa decidí preguntarle su nombre; “Patricia”...al escuchar su nombre me trajo una serie de recuerdos a mi mente, pude recordar algo, pero no sabía con exactitud lo que era... o lo que fue. Su calle era muy silenciosa y había alguna presencia que me hacia recordar mas cosas, pero, no sabia que era.

Llegando al departamento con “Tipens”, el tipo con el que vivía; me puso en claro las reglas de la casa, remarcándome que podía llegar a mas tardar a las 2:30, reclamando que éste no era un hotel, lo cual tenia razón, ya que era mi primera noche en el departamento y no tenia llaves, es muy desesperante el no saber quien eres. Decidí en ese momento que iría al día siguiente a casa de Patricia para seguir descubriendo mas eventos de mi vida pasada, tal ves eso me pueda ayudar y sacar de este apuro en el que estoy metido.
Al despertar, Tipens, muy emocionado me trajo el desayuno, desde que lo conozco no tenía esa cara de felicidad, ni mucho menos esa sonrisa de oreja a oreja:

- En la mañana vino una señorita muy bonita, me pidió de favor que te diera esto.
- Gracias, pero... no te dijo como se llamaba- respondí
- No... solo la dejo y se fue, al parecer tenia mucha prisa en salir-
- Bueno muchas gracias- estaba muy nervioso, pero a la vez muy ansioso de saber que decía la carta y sobre todo espero que diga algo muy importante; después la revisaré, mientras terminaré de desayunar y emprender la huida hacia la casa de Patricia.

Me dirigía rumbo a la casa de Patricia; antes de eso había olvidado leer la carta que habían dejado, no importa, tal vez no sea muy importante por eso no la leí; llegando a su casa me invitó a pasar para conversar un rato sobre aquellas cosillas que dejamos pendiente el día anterior. Empezamos hablando de varios amigos que según ella yo tenia y que por cierto no recordaba. Su platica era muy interesante, había algo en ella que me atraía y no era el físico ya que su forma de expresarse era muy diferente a la de Tipens y mía, o tal vez era que no había tratado a mujeres desde hace mucho tiempo. Repetía muchas veces ese nombre de Millarca, en ese momento recordé lo de la carta:

- Disculpa... en la mañana tú no dejaste una carta en mi departamento- pregunte con certeza- ya que eres a la única mujer que conozco pensé que habías sido tú-
- No, ni siquiera se en donde vives - respondió muy confundida

En ese momento me surgió mas la duda de la carta y decidí mejor regresar al departamento , para así descubrir quién había sido la dueña de esa carta. Rumbo al departamento varias personas me saludaron y por no ser descortés decidí responderles el saludo, era una persona muy importante o era muy social. Llegando al departamento, Tipens no estaba, eso me preocupo siempre se encontraba en el departamento. Al entrar a mi cuarto me di cuenta de que, Tipens había huido con la carta, ¿Por qué?, no lo sé.
Esa misma tarde salí corriendo a buscar a Tipens, tomé mi bolsa con los tres objetos y corrí hacia donde el viento me llevara, no sabia exactamente hacia donde me dirigía, pero algo me impulsaba a ir por ese camino. Llegué a una calle que me pareció muy extraña, nunca antes había visto una calle donde hubiera pinturas de paisajes; me detuve para observarlos y descubrir que era lo que llamaba mi atención. En ese momento recordé que en la bolsa traia un espejo; al sacarlo, el reflejo del espejo dio directamente en la pintura de unas montañas, tenia unas letras escritas:

-“eres la reencarnación del niño, convertido en un signo de interrogación”-

No sabia a que se refería esa escritura, ni porqué la tuve que encontrar, supuse que eran pistas para saber mi identidad y conocer mi verdadero Yo. Pasaron 6 horas en la búsqueda de Tipens y solo encontré una frase. Me preocupaba el simple hecho de que Tipens no regresara a casa, me sentía solo y con miedo.

En la noche desperté con mucha fiebre y temperatura, no recordaba nada de lo pasado, solo recordaba a Tipens....

-¡¡Tipens!!, ¿dónde estás?, me siento mal, podrías ayudarme.- grite desesperadamente
-Claro solo deja me pongo zapatos- contestó Tipens, decidí preguntarle de mi pasado a Tipens, para saber quien era
-disculpa Tipens, tengo una pregunta que hace mucho te quería hacer, pero no tenia el valor para preguntártelo. ¿quién soy?, ¿de dónde vengo?, ¿cuál es mi verdadero nombre?.-pregunte
- vaya que te afecto la temperatura que traes, te llamas Millarca, no lo recuerdas, mmmm... tus... padres te abandonaron cuando eras niño, trata de recordarlo- contesto Tipens.
Sabía que las últimas palabras que había pronunciado eran mentiras, pero para qué querria mentirme, no le entiendo es la única persona que podría saber de mi pasado. En ese momento me di cuenta que no podría confiar mas en Tipens....
Me levante en la mañana y fui a caminar un rato por los pasillos del edificio. Una señora me observaba de una manera muy peculiar, tal vez le recordaba a alguien o solamente me conocía. Fui directamente hacia ella y la salude muy cortésmente, pensé que si lo hacia tal vez podríamos entablar una conversación y sacarle algo de provecho a eso.

-buenas tardes señora, ¿cómo está?-
-bien gracias hijo, y tú, cómo estás, hace mucho que no te veía por estos rumbos, a qué se debe tu visita- me puse a pensar que contestarle para que me dijera algo sobre mi.
-Lo que pasa es que... vengo a pedirle el numero de teléfono de mi casa, lo perdí y usted sabrá que no tengo muy buena memoria-
-claro hijo, por qué no lo habías dicho, para la otra ya sabes que cuentas conmigo- me emocione en ese momento, al fin iba a saber quien era.

En ese mismo momento, marque a casa, solo para saber que misterios estaban ocultos en mi pasado. Nadie contestaba el teléfono y mejor lo intentare mas tarde; Tipens estaba muy raro, no hablaba y solo me estaba vigilando, nunca me había agradado su cara, pero en ese momento menos, parecia que algo le debía o que algo quería hacerme, sus ojos estaban furiosos. No quise preguntarle por qué. tal vez se hubiera enojado mas.
En la noche vi que estaba una carta tirada en mi recamara, lo malo es que parecía como si alguien la hubiera abierto...“anónimo”, no decía de quien provenía la carta ni tampoco tenia dirección:

“hola: te preguntaras de quién es ésta carta, no te lo puedo decir, pero te seguiré mandando cartas con algunos detalles sobre ti ....”

En ese mismo momento escuche que Tipens se acercaba, parecía que estaba buscando algo, escondí la carta bajo el colchón de la cama y me hice el dormido.
Desperté en la mañana y Tipens no estaba, así que mejor continué con la carta antes de que el llegara:

“ era vecina de tus padres, en este momento solo te podría informar que tuviste un accidente en un automóvil y que desde ahí perdiste la memoria, tu nombre es Millarca te seguiré escribiendo para que sepas mas sobre ti, P. D. No olvides tu bolsa con objetos tu amiga Kinghley.”

En ese momento sentí mucha tristeza al saber lo sucedido, mis ojos se empezaron a nublar y la tormenta empezó a caer sobre mi. Tipens aun no llegaba y tenia que esperarlo para poder salir, recordé el numero telefónico que me había dado la señora del pasillo, marque 7 veces, pero en ninguna de esas tuve suerte de encontrar a alguien. Daban casi las 6 de la tarde y Tipens no aparecía, entonces mejor decidí salir a tomar el aire fresco del atardecer. Caminando por el parque que estaba en el centro de la ciudad mi mente empezó a recrear situaciones muy comprometedoras.- Cómo seria la vida si no hubiera perdido la memoria, qué estaría haciendo si no hubiera tenido el accidente, tal vez estaría feliz o quizás no, pienso que yo provoqué que perdiera la memoria, mi vida no será lo mas complaciente como quisiera y tal vez por eso lo hice...-

Era inevitable sentir tristeza de mi suceso, revisé la bolsa, pero no encontraba ningún tipo de semejanza ni de acontecimientos que recordara o que fueran a sucederme; una de las cartas tenía fecha del 14/03/62, era la misma fecha que había escrito Kinghley. Fue algo sorprendente, revisé las demás cartas y también tenían fecha supuse que en esa fecha también llegarían cartas y por lo tanto estar pendiente por lo sucedido con Tipens.

-No puedo, despertar, es muy desesperante, estoy empapado de sudor, lleno de ira y de coraje, no se que hacer... tranquilizarme... tal vez... no lo sé con exactitud, es de esas veces que sientes que estas despierto, pero vuelves empiezas a soñar otra vez.....- dije entre sueños, bueno al menos eso me dijo Tipens.
Me quedé pensando en la cama mientras sostenía la carta entre mis manos, creo que solo es la desesperación de saber quién soy yo. El teléfono sonó en la noche, creo que nadie contesto.... en ese momento llame a casa una vez mas.

- Hola....
- Hola buenos días, hmmmm.... disculpe, me llamo Millarca no sé si alguien de ahí me conozca necesito saber algo de mi pasado, pero perdí la memoria y no sabia a quien recurrir, me dieron éste número...
-hmmm se acaban de mudar los dueños me dejaron una dirección, si quieres te la puedo dar...
-¡¡De verdad haría eso!?, se lo agradezco- en ese momento, el mundo volvió a brillar, la soledad se hacia a un lado, todo volvía a tener color, aun no tenia claro las cosas pero pensé que si podría ir a la dirección tal vez todo estaría mejor.

Empecé por arreglarme para ir, algo me decía que esta vez por fin tenia que conocer mi pasado. Eran las 6 en punto y emprendí la huida hacia mis parientes, claro sin olvidar mi bolsa para ver que sucedía.
Le comenté a Tipens que tenia que salir y no comento nada al respecto; solo digo que fuera con cuidado y que me esperaba antes de las dos, no lo tome muy en cuenta, pero por algo lo dijo.
Saliendo me encontré a la señora del pasillo, me detuve a saludarla

- Hola, buenas tardes ¿cómo está?
- Bien gracias, a dónde vas hijo?
- Voy a casa de mis parientes gracias a usted
- ¡que bueno! me da gusto, te recomiendo que llegues antes de las 2.
-Hmmm pero... ¿por qué lo dice?...
- Siento tu miedo, algo malo te puede suceder si no estás a esa hora- en ese momento si sentí mucho miedo, todo se empezaba a ver muy oscuro, parecía que las paredes escurrían sangre o pintura de color rojo, veía cosas extrañas que tal vez no existían pero mi mente las recreaba, no les di importancia y me fui.
Al llegar a la estación del tren, la gente se me quedaba viendo como si algo les debiera, un señor tropezó conmigo y murmuro algo que no pude entender, alcance a escuchar “que dios te ayude y te perdone”. El miedo recorría mis venas y todo mi cuerpo, en si no sabia que hacer, vi hacia mi alrededor y estaba una pintura con dos triángulos y un cuadrado, algo me recordaba que esto ya lo había vivido.
Al llegar a la parada tuve una imagen como una premonición, como si viniera del futuro y lo volviera a vivir para reconstruir lo que no pude hacer, mis instintos me guiaban, repentinamente estaba en el suelo cubriéndome la cabeza

-disculpe se siente bien?,recuerdo haberlo visto en el suelo convulsionando por algo - no lo entendí entonces, traía una nota en la mano.

“piensa rápido el tiempo se te acaba, recuerda las coincidencias, pueden ser tu salvación para salvarte de la muerte...15/03/62”

Me puse a buscar esa fecha en las cartas de la bolsa, se empezaban a marcar unas letras que decían exactamente lo mismo, y con la misma fecha...
Mis sentidos estaban alerta, la adrenalina se apoderaba de todo mi ser, mi visión se empezaba a distorsionar, figuras de personas empezaban a salir de la nada, la cabeza me estaba explotando de tantas cosas que traía en mente.
Todo se volvía una pesadilla había muchas caras siguiéndome, muchas marcas de sangre entre la desesperación total. Corrí rápidamente para salir de la estación. Al salir me di cuenta que estaba de regreso en casa, cómo había pasado esto, no lo logro entender, las calles eran tan conocidas, ya sabia por donde era el camino, algo me guiaba hacia casa, al doblar la esquina vi una señal algo me decía que ahí era el lugar donde tenia que asistir, me acerque hacia aquella luz.
Escuchaba voces que me decían que me alejara de ahí, de repente alguien salto sobre mi y caímos en la acera.

-¿¡Estás loco o que te pasa!?, ten mas cuidado
- Perdón, no podía moverme algo me hacia ir hacia allá... pero qué era esa luz...
-¿Qué era?, ¿estás loco?, era el tren..- en ese momento me desplome al suelo, pero tenia que seguir hacia la casa de mi pasado
-Gracias amigo te debo la vida
- Ten mas cuidado

Empezaba a caer la noche y aun no llegaba a mi destino, ésta serie de eventos aun no los podía entender, ¿cómo es que sucedió todo esto?, mas bien ¿porqué sucedió esto?, era extraño y a la vez confuso, pero esa adrenalina que tenia era lo emocionante, tenia que llegar a mi destino cueste lo que cueste...

- Díganme por favor ¿quién soy?...
- Ya te lo dijimos, que mas quieres saber ...
- Todo acerca de mi todo lo que he vivido y cómo he vivido, mis vivencias, ¿porque pasó?, ¿cuándo?, ¿cómo?, ¿dónde?.... vine hasta acá para saber quién soy y solo me pueden decir eso... no es posible, tengan un poco de conciencia, no vivo a la vuelta de la esquina... ¡necesito saber quien soy¡...- estaba muy alterado, no podía creer que solo me habían dado unos cuantos detalles.- pero si son la familia mas apegada de mis padres cómo o saben mas del problema y de lo que estoy viviendo...está bien... si no me quieren decir lo entenderé, pero necesito mas pistas, o alguna información para saber exactamente hacia dónde me dirijo, con quién voy y, ¿quiénes son?.

Después de contarme como pasó que perdí la memoria, estaba confundido... no sabia qué hacer, por una parte estaba feliz porque ahora veo la vida de otra forma, y hay que saber que las personas nunca te pertenecen; solo son prestadas, claro, pero no del todo. Ahora es cuando me pongo a pensar, ¿cómo seria la vida sin mi?, ¿qué cosas hubieran cambado?.... por que hay cosas que no puedes explicar y si lo estoy viviendo ¿qué es lo que tengo que hacer para poder salir de este problema?.... son tantas incógnitas, tantas preguntas si resolver; en general son demasiadas cosas que tengo que hacer ahora mismo, lo malo es que no se por dónde empezar... empezar por mi... pero... ¿¡haciendo qué!?... el destino nos tiene preparadas muchas trabas en la vida, en estos puedes estar feliz, pero en un segundo toda tu felicidad puede acabar, terminar, concluir...
Avenida 604, ahora qué podremos saber en este lugar, parece un vecindario lindo, espero que tengan aquí las respuestas a mi pasado y a todas mis dudas.
Ya es tarde y la puerta no la abren, esperare un rato mas a ver qué es lo que sucede.

-¿Qué desea?, ¡¡¡no le enseñaron modales en su casa, éstas no son horas para molestar a la gente!!!...
- disculpe las molestias, tengo un pequeño problema y creo que usted me puede ayudar, me llamo Millarca...
-¿¿Millarca??, no lo puedo creer, espérame tantito- al parecer algo había encontrado, la voz de la señora era de sorpresa, eso quería decir que algo sabe de mi – perdón por gritarte, no sabia que eras tu niño..pero... cómo es que diste con la casa?
- es una larga historia, después te la contare, ahora estoy muy cansado... ¿quién eres?...

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